Lomo adobado sencillo

Con los tiempos que corren, ahorrar un poquito en la lista de la compra más que una buena idea es un requisito imprescindible para luego no llevarnos sustos a la hora de ver la cuenta bancaria, que a la mínima que la dejemos sin vigilancia nos da un disgusto de lo más tonto.

Además, en algunas cosas es de lo más sencillo ahorrar.
Comprar piezas lo más grandes posibles, para luego trocear, limpiar y preparar nosotros en casa es muchísimo más económico que adquirir directamente el plato ya preparado.
Y como hoy en día disponer de congelador es de lo más normal tampoco supone un gran problema el ir almacenando los trozos restantes para las siguientes ocasiones.

Si compramos un lomo de cerdo entero, podemos cortar las raciones e irlas congenlando por separado, para una semana prepararlo marinado en salsa de vino de Porto, otra en un sandwich tipo francesinha, o el más tradicional asado con frutas secas, y -por supuesto- con este sencillo adobado.

Así logramos variedad y ahorro.

Por no mencionar que a menudo hay una pequeña diferencia de precio por el simple hecho de tener un adobado, que en realidad es sencillísimo de preparar en casa y no requiere ningún ingrediente especial.

Y esos dinerillos que nos ahorramos.

Preparación

Pelamos el ajo y lo machacamos en el mortero.
Lo mezclamos con el pimentón y salpimentamos generosamente, ya que no toda la sal se transferirá a la carne.
Agregamos el aceite, removiendo bien, y hacemos otro tanto con el agua.

Remojamos bien los filetes de lomo en la mezcla, asegurándonos de que se impregnen por todos los lados, y lo introducimos todo junto en una friambrera u otro recipiente hermético.
Dejamos marinar durante 2 días.

Si lo dejamos menos tiempo, solo una noche por ejemplo, el sabor será menos intenso pero tendríamos la ventaja de un adobado más rápido.

Freíamos en una sartén con aceite caliente.